domingo, 15 de marzo de 2009

Argentina y Chile II - más al norte

cataratas de Iguazú vistas desde el lado brasileño
meditando en la Garganta del Diablo


primera cena con Joe y Cristina en "nuestro" apartamento


en Puerto Madero, Buenos Aires


las mamás de la Plaza de Mayo, en su protesta semanal por los hijos perdidos..


Tango en la plaza Dorrego, San Telmo


en la Milonga, donde nadie nos sacó a bailar:-)


Caminito, en el barrio La Boca de donde dicen sale toda la cultura porteña (las casas eran pintadas de colores con lo que sobraba de la pintura de los barcos)

ejemplo de figuras en el museo al aire libre que es Caminito


tradición de los viejillos jugando al ajedrez en el parque Lezama


noche folklorica en Mendoza




menudo personaje..:-)

famoso Reloj de Flores de Viña del Mar, Chile


por fin el mar..en Viña del Mar.

vistas de Valparaiso desde la casa de Pablo Neruda


Valparaiso y sus calles



Para llegar a Iguazú tuve que hacer noche en el aeropuerto de Buenos Aires, así que me "acomodé" en las sillas del aeropuerto y me preparé para una de las noches más frias y largas...pero la recompensa fue grande!

El fuego del clima tropical después de congelarme en los mares australes, fue recibido con una gran sonrisa...si,si, como me gusta el caloooorrr!!!.


En Iguazú me quedaría dos dias. Uno para visitar la parte brasileña y otro para la parte argentina. La primera ofrece las vistas panorámicas de todas las cataratas, y es realmente impresionante...pero ya lo del lado argentino no tiene nombre, simplemente quita el aliento, el contacto con las cataratas es mucho más cercano. La garganta del diablo, una monstruosidad de agua cayendo que no puedes mas que quedarte embobado mirando como cae, y preguntándote como es posible que tal cantidad de agua caiga, y caiga y caiga...todos los dias del año...
Los dos dias visité las cataratas con gente del hostal, mis compañeras de habitación y otra gente que conocí. Con mi memoria dudo que recuerde un cuarto de los nombres de toda la gente que he conocido en este viaje...pero los importantes quedan, eso seguro.
Puerto de Iguazú, el pueblo desde donde se visitan las cataratas, no tiene nada que ver con el sur de Argentina. Se nota mucho más la pobreza que azota el norte del pais, y las gentes son mucho más indígenas...supongo que el gran choque cultural de Argentina se encuentra en los pueblos perdidos del norte, que conoceré en mi próxima visita.


Y vuelo a Buenos Aires!!. cuantas cosas buenas he oído de esta ciudad, que ganas de conocerla!. Aquí me encontraría con Joe y Cristina, las españolas que conocí en Bariloche y con las que pasaría casi una semana en Buenos Aires. Habían alquilado un apartamento para las tres, en un barrio muy local..así que por primera vez en mucho tiempo no dormiría en un albergue compartiendo habitación... La sensación era muy extraña. Me sentia como si estuviese en casa, en un piso en Madrid con unas amigas..y la verdad que esa sensación me hizo sentir morriña de Madrid (yo morriña de Madrid..increíble!!)


Pasamos unos dias increíbles en Buenos Aires, sobre todo por la gran conexión que hubo desde el principio entre las tres, como si nos conociésemos de toda la vida!!. Vamos, que me llevo dos amigas debajo del brazo...así de afortunada me siento!
Nos pateamos la ciudad de arriba a abajo. Y nunca mejor dicho, Joe tiene una especie de petardo escondido en algún sitio y cuando se levanta lo dispara y hasta que se agote...


Como dicen, los porteños (naturales de Buenos Aires) son italianos que hablan español y viven en Paris...Puerto Madero, Microcentro, Plaza de Mayo donde las madres se manifiestan todos los jueves por los hijos desparecidos o muertos durante la dictadura, San Telmo con sus calles de adoquines y sus tangos en la plaza Dorrego, los mercadillos por todos lados, Palermo con miles restaurantes y bares, El Caminito, Recoleta el barrio de Salamanca porteño.. me encanta Buenos Aires!!. Es una ciudad que enamora, me recuerda a lo que debió ser la España de nuestros abuelos.
Un dia fuimos a una Milonga, salas de fiesta con sus mesas donde los hombres te sacan a bailar Tango (por supuesto, nadie nos sacó- se dos debía notar la cara de "si no quieres hacer el ridículo en la pista, no me saques a bailar"). Pero me encanta el Tango, tiene un algo sentimental que transmite...
Otro dia nos hicimos un grupete de amigos en Palermo y lo que en principio iba a ser una copa terminó en una gran noche de fiesta hasta altas horas...que ya me hacía falta:-)


Un diez para Buenos Aires..tiene el peligro de no quererte ir. Pero yo tenía que seguir mi rumbo, así que me despedí de Joe y Cristina (un hasta luego, ya que tenemos muchos planes futuros juntas:-), y puse rumbo Mendoza.


Algo que he aprendido en este viaje, es que cada sitio merece una oportunidad. Si a primeras no te gusta un lugar, no huyas, ese más que ninguno necesita más tiempo para descubrirlo..y eso me ocurrió con Mendoza. Al principio no me dijo nada, pero como ya me sabía la lección, le di una oportunidad y no me arrepentí!!. Excursión a sus viñedos y bodegas, noche en caballo con luna llena por sus montes..ese dia, después de la travesía a caballo, nos prepararon un asado al aire libre en el mismo picadero... una hoguera y guitarras tocando tipicas canciones argentinas (bueno, los que me conoceis sabeis que no hay un plan mejor para mi)- así que como os podeis imaginar acabé intima de los cowboys y subida en los montículos de paja bailando folklore argentino:-)).


Un triste adiós a Argentina, autobús nocturno hasta Viña del Mar y Valparaiso en Chile, donde estoy ahora y donde me quedo unos dias tranquila, sin tanto trote, haciendo análisis de este gran viaje y preparándome para la vuelta.


Viña del Mar no me atrajo nada, hasta que vi el mar...ya lo echaba de menos!. Así que estos dias he pasado horas andando en la orilla con mi musiquita...y Valparaíso..una ciudad preciosa, decadente con su puerto y sus casitas de colores sobre más de cuarenta cerros a los que se accede por ascensores milenarios que te transportan en el tiempo. En Valparaíso está La Sebastiana, una de las casas de Pablo Neruda al que yo tengo especial aprecio desde que alguien escribió hace más de 20 años en mi carpeta del cole el poema 20 de "veinte poemas de amor y una canción desesperada" ...es tan corto el amor y tan largo el olvido...

1 comentario:

Unknown dijo...

Esta vez te has salido con la descripción Pa, resulta que me han entrado ganas de ir a Argentina, así que te preguntaré para visitarlo.

Bueno, ya queda menos de tu gran aventura, pero la has disfrutado y nos has hecho disfrutarla a nosotras!!!!!!

Muchos besos
Oli